Proyecto Social de Formación: Ciudadanías Digitales

Corporación Universitaria Minuto de Dios -UNIMINUTO-
Bogotá D.C.
Innovación pedagógica
2021

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Área o áreas de la institución que desarrollan la práctica
Pedagógica / Académica

Problema o necesidad que originó la práctica
Uniminuto, como parte del proceso de formación, promueve la responsabilidad social como un eje articulador de la formación integral de su modelo educativo, para materializar esta apuesta creó el curso de Práctica en Responsabilidad Social (PRS); transversal, interdisciplinario y desarrollado en organizaciones comunitarias.

La PRS se realiza a la luz de los Proyectos Sociales de Formación, que buscan un impacto educativo y transformaciones en las comunidades. La sede virtual y a distancia encuentra la necesidad de comprender procesos de formación ciudadana mediados por la virtualidad, dado el auge de las TIC y su implicación en la construcción de nuevas relaciones y comprensiones, posibilitando espacios para el desarrollo de la PRS acordes a la modalidad, creando así el presente proyecto.

Mecanismo usado para identificar el problema
  • Análisis institucional

Descripción del mecanismo
La comunidad académica realiza análisis permanente de las implicaciones que las TIC y todas sus prácticas emergentes generan en los procesos educativos. Por tanto, se cuestiona sobre la gestación de nuevos escenarios con interacciones de orden global desde realidades locales, para buscar estrategias que permitan aportar al desarrollo humano integral y fomento de la dignidad humana desde una perspectiva de ciudadanía digital.

Teniendo presente que la PRS se desarrolló durante más de 25 años en escenarios presenciales de orden comunitario, este proyecto permitió transitar a nuevos ambientes de aprendizaje desde la virtualidad que gozan de la misma riqueza e impacto que los escenarios comunitarios presenciales. Lo anterior permite que los estudiantes aborden temáticas de interés glocal.

Resultados cuantitativos esperados
    • 500 estudiantes de Uniminuto movilizan por año, mediante las redes sociales virtuales, acciones pedagógicas y de sensibilización en torno a problemáticas sociales actuales.

    • Desarrollar campañas que incentiven la reflexión y la acción de cambio para que al menos 4.000 beneficiarios de grupos o comunidades hagan parte del desarrollo del proyecto.

    • De los 19 centros de educación que tiene Uniminuto como unidades que lideran la formación en responsabilidad social a nivel país, 7 de ellos realizan transferencia e implementación del proyecto.

    Resultados cualitativos esperados
      • La comprensión por parte de los estudiantes del uso de las redes sociales virtuales, como instrumento de transformación social, desde una postura ético-política que favorezca la ciudadanía crítica.

      • El análisis de problemáticas sociales como la afectación ambiental y la discriminación, permitiendo la generación de acciones con incidencia positiva en el contexto por parte de los estudiantes.

      • Generar espacios de socialización virtuales, entre las redes primarias de los estudiantes y otros interesados en las problemáticas sociales abordadas.

      Actividades desarrolladas en la implementación
      Los estudiantes eligen el proyecto social de formación por el interés que les suscita. Las temáticas que más se trabajan son género, economía solidaria, cuidado de la casa común, consumo responsable y cuidado y protección animal.

      Los estudiantes realizan una aproximación teórica-histórica del tema elegido; así mismo, hacen una indagación de buenas prácticas y una contextualización institucional y legal, de esta forma se tiene una panorámica amplia sobre la temática que se abordará.

      Crean espacios y material virtual como un fan page, retos solidarios y webinars para socializar alternativas de intervención innovadoras, entrevistas a expertos y talleres interactivos: es un espacio para construir procesos o productos que afecten positivamente la realidad.

      En 2020 durante la pandemia, se realizó transferencia del conocimiento a otras 7 rectorías de Uniminuto a nivel nacional, permitiendo un modelo adecuado que se orientó a temas de economía solidaria, cuidado de la casa común, consumo responsable y protección animal, principalmente.

      En articulación con:
        • Otras áreas institucionales: Rectorías del sistema.

        • Otras entidades de otros sectores: Juntas de Acción Comunal y líderes comunitarios.

        Esta articulación consistió en:
        Las articulaciones se dan con otras rectorías de Uniminuto, transfiriendo el proyecto para que pueda ser implementado, inicialmente, en la emergencia de la pandemia y así fortalecer procesos sociales con adaptaciones a los diferentes contextos territoriales.

        Con las Juntas de Acción Comunal y diferentes organizaciones sociales se realizaba un mapeo de necesidades, involucrando a las comunidades en los espacios virtuales de fortalecimiento ciudadano, llegando a acciones concretas de apropiación del territorio, por ejemplo: embellecimiento conjunto de parques de bolsillo.

        Elementos innovadores de la práctica de acuerdo con el contexto
        El uso responsable de las redes sociales con fines académicos, entendiendo la virtualidad como una trama o un escenario de interacción social, lo cual permite el surgimiento de nuevas subjetividades, desarrollando a la vez la construcción y comprensión de otras realidades que ameritan el abordaje crítico desde la academia, con una constante discusión y reflexión que permita el aprovechamiento de estas para el servicio de las personas y las comunidades en los diferentes escenarios, especialmente, en los formativos; ya que pueden aportar en la transformación de las comunidades.

        El desarrollo de la creatividad de los estudiantes para construir y socializar propuestas de acción y sus correspondientes hallazgos mediante las redes sociales virtuales con comunidades locales, buscando que estos ejercicios posibiliten el diálogo de problemáticas y temas de interés global como la relación de los seres humanos con la vida, el uso de las redes de comunicación y su impacto en la vida de las personas, entre otras; que en últimas afectan de manera global a la humanidad y que requieren un abordaje crítico y una comprensión multidimensional. Estos espacios se complementan con invitados externos que enriquecen los diálogos y comprensiones.

        Se concibe lo virtual como parte de las construcciones emergentes que se suscitan alrededor del auge de las tecnologías de la información y la comunicación, y que permite el surgimiento de otras relaciones humanas y procesos de reciprocidad que deben ser comprendidos desde distintas visiones para fortalecer la responsabilidad social alrededor de estas nuevas formas de existencia. Esta visión facilita que la academia se implique de manera crítica en diálogos abiertos y multidisciplinares para tener una participación activa desde perspectivas amplias y críticas.

        Mecanismo de evaluación del desarrollo y los resultados obtenidos
          • Focus group
          • Análisis de informes finales
          • Encuesta

          Descripción del mecanismo
          Grupo focal en el cual los protagonistas fueron estudiantes que vivenciaron las acciones del proyecto social de formación y los docentes que acompañaron. Mediante la técnica de trabajo comunitario de tendedero social se buscó suscitar narrativas a cerca de las experiencias y posibles reflexiones; posteriormente, se emplearon matrices de doble entrada, las cuales mostraban, por una parte, acontecimientos de la experiencia e hitos históricos y, por el otro, las narrativas de los actores.

          Aplicación de la “Encuesta evaluación de la práctica en responsabilidad social a los estudiantes”, la cual busca conocer aprendizajes, percepción y valoración de la experiencia en la práctica en responsabilidad social.

          El análisis de los informes semestrales de este proyecto brindó información para su mejoramiento.

          Resultados cuantitativos de la práctica
          • 1.061 estudiantes que realizan la Práctica en Responsabilidad Social se vincularon al proyecto en el año 2020.

          • A partir de las estrategias desarrolladas, se cuenta con un total de 10.874 beneficiarios de diversas comunidades.

          • Transferencia del proyecto y su metodología a 7 rectorías de Uniminuto como una buena práctica.

          Resultados cualitativos de la práctica
          • La comprensión de problemáticas sociales de los contextos inmediatos mediante las redes.

          • Movilización estratégica de redes sociales virtuales para comprender problemas contemporáneos.

          • Sensibilización y discusión de problemas contemporáneos con distintos grupos poblacionales.

          • Escenarios de aprendizaje fortalecidos por actores externos, invitados por los estudiantes.

          Conclusiones generadas a partir de la evaluación
          Las TIC como ejes de interacción humana que inciden en la cotidianidad y que requiere discusión académica para su aprovechamiento en escenarios educativos.

          Las redes sociales virtuales pueden ser escenarios para proponer y desarrollar procesos de transformación social y construcción de nuevas ciudadanías.

          Las redes sociales virtuales ofrecen elementos innovadores y pertinentes para analizar los problemas contemporáneos y construir alternativas de solución.

          Los procesos de responsabilidad social universitaria se deben extender a las comunidades virtuales para aprovechar su capacidad.

          Principales transformaciones derivadas de la buena práctica
          Identificar y promover liderazgos que están relacionados con un mundo interconectado, mediante el uso de redes sociales virtuales y pensamiento crítico frente a las situaciones problémicas abordadas.

          El desarrollo de habilidades en los estudiantes para gestionar convocatorias a espacios de socialización, los cuales conllevan una sensibilización ciudadana, realizando planeación, divulgación, creación de contenido por medio de la fan page, sobre cambios de hábitos en consumo responsable en los hogares de los participantes.

          Así mismo, movilizar las redes sociales posibilitó la capacidad para liderar y gestionar espacios en los que la comunidad se interesó en temas como derecho a la educación, derecho a la salud, derecho a la recreación y el deporte.

          En cuanto a formación en ciudadanía:

          Reconocimiento de las redes sociales como espacio que permite sensibilizar y reflexionar a partir de la temática que cada equipo de estudiantes lideró. Además, en la situación de confinamiento permitió ampliar las formas de desarrollo de la práctica en responsabilidad social a nivel institucional, para fortalecerla de manera virtual, lo cual permitió desarrollar habilidades en el uso de juegos interactivos, movilización de contenidos y uso de herramientas TIC que favorecieron a diferentes grupos poblacionales.

          Documentación del proceso de planeación, implementación y evaluación de resultados
          Medios de divulgación de la práctica