Área o áreas de la institución que desarrollan la práctica
Centro de Excelencia Docente Unidad de Evaluación
Problema o necesidad que originó la práctica
En el marco de la presente innovación académica se destaca a nivel institucional la necesidad de implementar la función formativa de la evaluación del aprendizaje en el ámbito de la educación superior, aspecto que genera grandes de desafíos, ya que requiere desde la gestión del profesor retroalimentar a los estudiantes de forma continua, haciéndolos conscientes de su proceso y que puedan identificar, en todo momento, tres dimensiones a saber: ¿dónde están?, ¿qué les hace falta? y ¿qué tienen que hacer para desarrollar las competencias genéricas y especificas? Por otra parte, atender a los resultados de la evaluación del aprendizaje y contar con la oportunidad de hacer uso de sus resultados para la toma de decisiones y mejora continua es, en contexto, la problemática que orientó la presente innovación.
Mecanismo usado para identificar el problema
Descripción del mecanismo
Desde la perspectiva institucional y derivado de los procesos de autoevaluación, que consideran la participación de todos los actores, se consolidó todo un cuerpo de comprensiones derivados de la reflexión y el análisis colectivo. De esta manera, se abrió paso a identificar, en el marco de la evaluación del aprendizaje, oportunidades de fortalecimiento orientadas, por una parte, a la gestión del profesor de la función formativa de la evaluación, de tal forma que permitiera el aseguramiento del aprendizaje; y, por otra, consolidar una práctica en el marco de la evaluación del aprendizaje, que diera cuenta del uso de los resultados como acción que dinamizará la reflexión y el análisis, orientado al mejoramiento continuo de los procesos académicos.
Resultados cuantitativos esperados
- Alcanzar el 100% de las asignaturas de toda la universidad, implementando de forma consciente e intencional procesos centrados en la evaluación formativa.
Resultados cualitativos esperados
- Desde la gestión del profesor en aula, implementar la evaluación formativa que permita la retroalimentación permanente y asegure el aprendizaje.
Actividades desarrolladas en la implementación
Análisis de las tendencias mundiales en torno a la evaluación del aprendizaje, que permitiera establecer un horizonte actualizado en esta materia, orientando desde el estado del arte y el marco teórico todo lo que es la estructura de la propuesta.
Diagnóstico institucional sobre las prácticas evaluativas de los profesores. Desde esta perspectiva, se hace un reconocimiento institucional de las prácticas de la evaluación del aprendizaje, evidenciándose la función sumativa como predominante.
Integración de la función formativa y sumativa en el marco de la evaluación del aprendizaje por competencias. Generar una articulación de la función formativa y sumativa de la evaluación del aprendizaje que pudiera orientar el proceso.
Balance, retroalimentación y transformación cultural de la evaluación en la institución. Esta actividad permite evaluar de forma permanente las tensiones y desafíos que la transformación implica a nivel institucional.
En articulación con:
- Otras áreas institucionales: alta dirección, programas, comités curriculares y departamentos.
Esta articulación consistió en:
Dada la naturaleza de la propuesta, resultó necesario establecer articulación, en primera instancia, con la Vicerrectoría Académica, que participó de forma permanente en la estructuración y diseño de la propuesta, aportando los aspectos esenciales para considerar en su ejecución.
De igual forma, se pasa a la articulación con los programas y, específicamente, con sus comités curriculares, con quienes se socializa la propuesta y se recibe retroalimentación.
Finalmente, se socializa la propuesta con los decanos de departamento, como responsables de los profesores, y con los decanos de facultad, como responsables de los estudiantes, generando los ajustes necesarios al reglamento estudiantil.
Elementos innovadores de la práctica de acuerdo con el contexto
Desde la perspectiva institucional, la propuesta propone un modelo de evaluación del aprendizaje que privilegia la evaluación formativa como escenario que permite la retroalimentación permanente y asegura el aprendizaje. Es una propuesta que se encuentra orientada, a partir del uso de los resultados de la evaluación del aprendizaje, al análisis permanente y la toma de decisiones que permitan el mejoramiento continuo y contribuya al desarrollo de una práctica reflexiva.
Desde la gestión del profesor, la propuesta posibilita una práctica reflexiva centrada en procesos de evaluación formativa que le permitan tanto al profesor como al estudiante ser corresponsables del proceso de enseñanza, a partir de la retroalimentación oportuna que le permite al estudiante identificar en todo momento dónde se encuentra, qué le hace falta y qué camino debe seguir para alcanzar los resultados de aprendizaje. Este aspecto resulta esencial cuando se trata de asegurar el aprendizaje en el contexto de la educación superior. Este elemento se reconoce como innovador, dado el carácter histórico que tiene la calificación desde la gestión del profesor y que repercute en las dinámicas de interacción del aula, ocasionando en algunos casos desafíos y tensiones por superar.
Le permite al estudiante desarrollar procesos centrados en el aprendizaje y en el desarrollo de sus competencias, generando autorregulación y contribuyendo al desarrollo del aprendizaje autónomo. Desde esta perspectiva, los procesos de evaluación formativa centran al estudiante en el aprendizaje y desinstala la calificación como propósito del acto pedagógico, aspecto que se constituye en un verdadero desafío a nivel institucional y que se reconoce como un proceso de transformación que toma su tiempo.
Mecanismo de evaluación del desarrollo y los resultados obtenidos
- Focus group
- Análisis de informes finales
Descripción del mecanismo
Desde los focus group, fue posible identificar, al cierre del primer semestre de implementación, aspectos importantes que ameritaron ser atendidos y tomar decisiones para ajustar. En este sentido, se logra parametrizar las ponderaciones de la evaluación sumativa de forma diferente, sin abandonar la relevancia que tiene para la propuesta la función formativa de la evaluación del aprendizaje.
En esta misma dirección, los análisis de informes finales le permiten a la institución, a través de la unidad de evaluación, hacer análisis cualitativos y cuantitativos de los resultados que se van obteniendo; circunstancia que permite generar retroalimentación puntual donde se requiere.
Resultados cuantitativos de la práctica
- En la actualidad, la propuesta ha alcanzado un 80 % del plan de estudio.
- Los promedios académicos obtenidos en el marco de la evaluación sumativa se encuentran en 3,76.
- Los porcentajes de aprobación han alcanzado el 79 % de los estudiantes vinculados con la estrategia.
- Alta coherencia curricular, reflejada en el 80 % de las asignaturas del plan de estudio.
Resultados cualitativos de la práctica
- A nivel institucional, se encuentra en marcha una propuesta centrada en la evaluación del aprendizaje.
- Gestión centrada en la evaluación formativa como la oportunidad de asegurar el aprendizaje.
- Avances en el marco de la autorregulación y el aprendizaje autónomo entre los estudiantes.
- Procesos de enseñanza aprendizaje articulados a resultados de aprendizaje y evaluación.
Conclusiones generadas a partir de la evaluación
El dinamizar propuestas orientadas a la evaluación del aprendizaje se constituye en una oportunidad institucional para generar transformaciones que tributen al aseguramiento del aprendizaje.
Los procesos de la evaluación del aprendizaje centrados en la evaluación formativa permiten una gestión por parte del profesor orientada al aseguramiento del aprendizaje.
Los resultados de la evaluación sumativa se ven impactados positivamente en el marco de procesos de evaluación formativa gestionados por los profesores en el aula.
Los procesos de evaluación formativa gestionados por el profesor en el aula privilegian ambientes de aprendizaje centrados en la confianza y la buena comunicación; aportados de las tensiones comunes.
Principales transformaciones derivadas de la buena práctica
A nivel institucional, se evidencian transformaciones a través de la elaboración del modelo de evaluación del aprendizaje, como documento que orienta la evaluación del aprendizaje y detalla su coherencia con las políticas institucionales. El documento fue el resultado de una construcción colectiva, en la que participaron todos los actores estratégicos de la comunidad institucional: profesores, directivos y estudiantes, lo que lo hace un documento altamente coherente con la realidad institucional y refleja la realidad del contexto.
Desde la gestión del profesor, existe un reconocimiento institucional que centra la gestión del aula en los procesos de evaluación formativa; permitiendo en todo momento, a partir de la retroalimentación, saber dónde se encuentra el estudiante, qué le hace falta y qué camino debe seguir para alcanzar los resultados de aprendizaje. Este aspecto se constituye en una transformación significativa de la práctica del profesor que se sistematiza a través de la plataforma SISEF, que consiste en un sistema de información en el cual el estudiante puede visibilizar la retroalimentación que hace su profesor a partir de su desempeño en el aula.
Documentación del proceso de planeación, implementación y evaluación de resultados
Desde esta perspectiva, la propuesta fue documentada a partir de los documentos institucionales que ameritaron ajustes; entre ellos: Modelo de Evaluación, Modelo Pedagógico, Modelo de Competencia y Modelo Curricular.
Medios de divulgación de la práctica
